NO QUEREMOS MAS COLEGIOS DE BARRACONES: Austeridad económica

austero, ra.

(Del lat. austērus, y este del gr. αὐστηρός).

1. adj. Severo, rigurosamente ajustado a las normas de la moral.

2. adj. Sobrio, morigerado, sencillo, sin ninguna clase de alardes.

3. adj. Agrio, astringente y áspero al gusto.

4. adj. Retirado, mortificado y penitente.

económico, ca.

(Del lat. oeconomĭcus, y este del gr. οἰκονομικός).

1. adj. Perteneciente o relativo a la economía.

2. adj. Moderado en gastar.

3. adj. Poco costoso, que exige poco gasto.

Es fácil deducir el significado de la archiconocida locución "austeridad económica" que tanta frecuencia ha cobrado en los discursos políticos:
1.- Gestión económica de una empresa o administración pública severa y ajustada rigurosamente a las normas de la moral.
2.- Gestión económica de una empresa o administración pública sobria, morigerada, sencilla y sin ninguna clase de alardes.

Sin embargo, no parece que estas definiciones se ajusten al último mega-anuncio de autobombo y complacencia de nuestros gobernantes más cercanos. Eso sí disfrazado de "demanda ciudadana" parece que lo de gastarse más de 4 millones de euros en el nuevo ayuntamiento en plena crisis es lo que queremos los habitantes de almazora.

Camps anuncia que Almassora tendrá su nuevo ayuntamiento listo en 2011
( El Periódico Mediterráneo - 04/08/2010 )

Aunque claro, cabría plantearse qué entiende por "normas de la moral" el anunciante imputado judicialmente en el caso gürtel. Posiblemente podrían haber dedicado esos 4 millones de euros a la adquisisción de solares para un tercer instituto, para adecuar el entorno del Embajador Beltrán, o el largo etcétera en el déficit de infraestructuras educativas del que adolecemos en Almassora.
Quizás lo que entienden por austeridad, según sus normas de la moral, son los grandes gastos en infraestructuras y eventos de dudosa necesidad.

La deuda de la Generalitat sigue a la cabeza de España
( Levante El Mercantil Valenciano - Viernes 18 de diciembre de 2009 )

Pues ya veremos como continuarán usando a la gente del pueblo como excusa para construir sus "negocios" de tipo aeropuerto de Castellón a 6 euros de dinero público por cada viajero previsto (600.000) que no utilizase finalmente el aeropuerto con su publicidad de 6,5 millones de euros al año. O aquel famoso parque temático de Castellón conocido Mundo Ilusión que nada tendría que envidiarle al exitoso Terra Mítica de Benidorm.
Tenemos por delante la construcción de la Ciudad de las Lenguas cuyo Consejero Delegado cobra 6.000 euros al mes (J.L. Gimeno exalcalde PP de Castellón) además de la corte que lleva (generando empleo). La fórmula uno, cuyo canon debería haber pagado una empresa privada pero lo paga la Generalitat, también es algo que preferimos antes que los colegios para nuestros hijos.
También nos impresionó el cuento de la lechera conocido como informe "Impacto Económico de la America's Cup" que elaboró el prestigioso Instituto Valenciano de Investigaciones Económicas y que fue secundado por el gobierno de Zapatero, el mismo al que ahora acusan de tener a Valencia como el apartheid.
Otro ejemplo de austeridad, en este caso cristiana, fue el coste de la visita del Papa a Valencia que superó los 25 millones de euros. Imaginamos que en un estado aconfesional, habrá que sufragar de igual forma la visita de las figuras más eminentes de otras religiones, protestantes, judíos, musulmanes y budistas, por ejemplo. Por supuesto, antes que un colegio para cada 500 niños preferimos gastar el dinero en esto (Almassora tendría solucionado el problema).
Seguramente la lista podría ser interminable, pero ya nos encargaremos de que siga creciendo en legislaturas futuras.
En resumen, que el señor alcalde se debió sentir más orgulloso que una mosca en una mierda con la inauguración de las obras presidida por el molt (presuntament) honorable president mientras a los ciudadanos que administra nos toca ver a los niños en barracones durante décadas.

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